22/8/12

CAIDA DE RAMAS SOBRE LA CATENARIA DEL METROCENTRO





El tranvía de Sevilla, el llamado Metrocentro, se encuentra actualmente paralizado, a la espera de que los operarios de Parques y Jardines eliminen un árbol en la avenida de la Constitución a la altura del cruce de Santo Tomás y que cuenta con riesgo de caerse.

Según han informado a Europa Press fuentes del Ayuntamiento de Sevilla, el funcionamiento del tranvía de la capital hispalense quedó paralizado entre las 6,00 y las 7,00 horas de este miércoles como consecuencia de una rama que obstaculizaba el paso, ubicada en la avenida de la Constitución a la altura del cruce de Santo Tomás.

Una vez retirada la rama, retomó su recorrido a las 7,00 horas, mientras que sobre las 9,30 horas fue interrumpido de nuevo al valorar que el árbol al que se había retirado la rama podría caerse. En este sentido, para garantizar la seguridad de los viandantes y de los pasajeros del metrocentro, el Ayuntamiento se encuentra retirando este árbol, siendo reactivado el tranvía una vez que se finalicen los trabajos.

9/8/12

Roban un cajero de una gasolinera y lo dejan en la calle al no poder abrirlo



La Policía Nacional ha recuperado un cajero automático que fue sustraído de una estación de servicio y abandonado en la calle después de que los ladrones no consiguieran reventarlo. Para poder abrirlo, la Policía tuvo que llamar a los Bomberos, que estuvieron toda la mañana de este miércoles en la Jefatura hasta que, después de más de cinco horas de esfuerzo, lograron recuperar los 26.000 euros que contenía el cajero.
La máquina pertenece a la Caja Rural y se encontraba en la estación de servicio Virgen de las Nieves, de donde fue sustraída hace unos días. Tras intentar forzarlo sin éxito, los ladrones decidieron dejar el cajero en mitad de la calle. Un patrullero de la Policía Nacional lo encontró abandonado dentro de un coche en la vía de servicio de la ronda de circunvalación SE-30 a la altura del polígono industrial Carretera Amarilla, que recibe el nombre de calle Fernández Murube. El dispositivo se encontraba dentro de una furgoneta con matrícula de Huelva que habría sido utilizada por los ladrones para sustraerlo de la gasolinera.

Los agentes que hallaron el cajero lo trasladaron junto con la furgoneta intervenida a las instalaciones de la Jefatura Superior de Policía, en la avenida de Blas Infante. En el patio central de la Jefatura, los agentes intentaron abrir el cajero sin éxito y requirieron la colaboración de los Bomberos del Ayuntamiento de Sevilla. Un mando, tres agentes y dos conductores del cuerpo de Bomberos acudieron a la llamada de la Policía y, tras más de cinco horas, pudieron acceder hasta el lugar en el que se hallaba el dinero. Los Bomberos emplearon una máquina radial para tratar de horadar el cajero, una tarea en la que fracasaron en los primeros intentos. Los discos de la radial se partieron en varias ocasiones, hasta el punto de que los agentes se quedaron sin más repuestos.

Se toparon con que el servicio de mantenimiento no podía proveerles de más discos, bien porque no quedaban, bien porque la persona que estaba encargada de esta tarea se encontraba de vacaciones. El caso es que, según testigos presenciales, tuvieron que acudir a un establecimiento de Triana a comprar los discos con dinero de su bolsillo. Finalmente, casi a la una de la tarde, lograron acceder hasta el cajillo que contenía los billetes de 20 euros, y una hora más tarde, al de los de 50.

La Policía hizo entrega este miércoles del dinero recuperado a los responsables de la entidad Caja Rural, mientras que continúa realizando gestiones para tratar de identificar y detener a los autores del robo. Los agentes están examinando el cajero y el vehículo en el que fue abandonado para tratar de hallar alguna pista que los lleve hasta los ladrones y, sobre todo, conocer si éstos podrían haber repetido esta forma de actuar en alguna otra ocasión. El Grupo IV de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) se está encargando de la investigación.

Se trata de un suceso peculiar en Sevilla, donde rara vez se habían registrado robos de cajeros automáticos enteros. Sí es mucho más habitual que se fuercen o se introduzcan dispositivos para reventar cajeros de las sucursales bancarias. La Policía ha realizado múltiples operaciones contra bandas especializadas en desvalijar estas máquinas.

8/8/12

INCENDIO EN EL CHARCO DE LA PAVA

Un incendio en el Charco de la Pava provoca una gran columna de humo

Una dotación del Cuerpo de Bomberos de Sevilla se trasladó este martes hasta el Charco de la Pava, en la Isla de la Cartuja, donde, en torno a las dos del mediodía, se había producido un incendio entre los restos de basura acumulados, lo que provocó una enorme columna de humo. Con este se contabilizan tres incendios en la misma zona desde el inicio de la temporada estival.

6/8/12

Un Parque de Bomberos digno de protección



La Consejería de Cultura ha recibido una petición para que se declare Bien de Interés Cultural (BIC) el Parque de Bomberos de San Bernardo. La solicitud de protección se basa tanto en el valor histórico y artístico del inmueble, diseñado según los patrones del movimiento regionalista, como en su propia originalidad, ya que es el único edificio de este estilo concebido ex profeso como Parque de Bomberos. Pese a que la petición se presentó el pasado 8 de marzo -coincidiendo simbólicamente con la festividad de San Juan de Dios, patrón de los Bomberos-, la Junta sólo ha acusado recibo de la misma asegurando que iba a valorarla y emitir un informe.

Desde entonces la solicitud ha quedado en el aire y el Ayuntamiento de Sevilla inició el pasado mes de junio las obras de reforma que tenía previstas para mejorar unas instalaciones que presentaban un avanzado estado de deterioro. La petición de protección la ha formulado un miembro del cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Sevilla, Alberto Bernabé, que además es doctor en Antropología Social y ha estudiado a fondo la historia de este edificio. Ahora, su temor es que piezas valiosas como los azulejos o las rejas de forja puedan ser destruidas durante los trabajos de reforma, algo que ha hecho saber por escrito tanto al alcalde, Juan Ignacio Zoido, como al delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez.

Al primero, como titular del inmueble, le pide que se adhiera a la declaración de BIC o bien que presente otra independiente, así como que "inste a sus órganos de control e inspección para que se garantice que las obras que actualmente se están realizando en el edificio no deterioren su valor histórico, artístico o etnográfico".

Ante la falta de respuesta, envió otro escrito a la Junta pidiendo que se informara de los trabajos al Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) y que no se alterara el diseño primigenio del edificio. También le pide que se le informe del estado de su solicitud de declaración de BIC, ya que la ley andaluza de patrimonio histórico indica que "la solicitud se entenderá desestimada transcurridos tres meses desde su presentación sin haberse dictado y notificado resolución expresa". Las obras de rehabilitación han comenzado precisamente justo tres meses después de que Bernabé registrara su petición.

Para este bombero, que lleva 30 años en el cuerpo, el Parque Central debe gozar de protección por ser ejemplo de una "arquitectura industrial ligada a un oficio concreto, cuyas formas reflejan unas maneras de trabajar, unos conocimientos y unas técnicas que difícilmente se pueden dar en otro tipo de oficios". Así, explica que los arquitectos regionalistas Antonio Arévalo Martínez y Juan Talavera Heredia concibieron el edificio con una estructura en U que se abre a un patio central a cuyos pies se levanta una torre de tres cuerpos.

Estas formas están puestas al servicio del propio trabajo de los bomberos. El interior de la planta baja es diáfano para poder estacionar los carros y las caballerías de los Bomberos de los años 20, además de poder albergar vehículos y escalas modernas. El patio trasero tiene un pozo en el que se puede practicar en el llenado de las cisternas, mientras que la torre se utiliza para practicar maniobras de salvamento y escalada. "Los bomberos podían hacer rappel por el hueco central de la torre y los balcones se abren hacia fuera para poder escalar por la fachada", explica Bernabé. Esta torre, además, estaba pensada para ser vista desde distintos puntos de la ciudad, ya que fue pensada como torre de comunicaciones. "Con una luz colocada en la cubierta de la torre se alertaba, mediante señales luminosas, a los bomberos francos de servicio para avisarles de que se había producido un siniestro en el que se les requería de inmediato. Estas señales se acompañaban de los toques de campana de la parroquia más cercana al incendio".

El autor del informe también destaca el valor de los elementos de forja, remates exteriores y pináculos, así como el gran panel de azulejos dedicado a la figura de San Juan de Dios colocado por orden de Alfonso Jaramillo en 1958, cuando éste era concejal de la ciudad. Igualmente, hace hincapié en el entorno en el que está ubicado, con otros edificios protegidos como la Fábrica de Artillería, la Diputación o la estación de tren.

1/8/12

La Guardia Civil y los Bomberos buscan en el río el cuerpo de un bañista



La Guardia Civil y los Bomberos de Sevilla buscan desde la noche de este martes el cuerpo de un bañista ahogado en el río Guadalquivir, a la altura de la pasarela de la Cartuja. Las labores de rastreo se suspendieron pasadas las diez de la noche y continuarán a lo largo de este martes, después de que el inicio de los trabajos de búsqueda se demorara unas cinco horas al encontrarse los submarinistas de la Guardia Civil prestando otro servicio en la provincia de Cádiz.

El aviso de una persona que pedía socorro y se sumergía en el río se produjo sobre las cuatro y media de la tarde. Varias personas que paseaban por la pasarela que unía la antigua estación del telecabina de la Expo con el Monasterio de la Cartuja vieron cómo el bañista se hundía y no salía a flote. Los testigos llamaron al servicio de emergencias 112 relatando lo ocurrido y al lugar de los hechos acudieron una dotación de Bomberos y otra de la Policía Local de Sevilla.

Cuando llegaron los Bomberos al lugar indicado por los testigos en una embarcación, no había ni rastro del bañista. Los agentes del servicio de extinción de incendios colocaron una boya justo en el sitio marcado por los testigos y solicitaron la presencia de la Guardia Civil, cuerpo que tiene las competencias en el río y que cuenta con una unidad de submarinistas, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS).

Los buzos del instituto armado se encontraban en ese momento trabajando en la provincia de Cádiz, por lo que la búsqueda del cuerpo se demoró aproximadamente en cinco horas. Durante ese periodo varios policías locales colocaron un precinto en la orilla para impedir que nadie se arrojara al agua o que alguna embarcación pudiera mover el cuerpo. Cuando finalizó el servicio en Cádiz, el helicóptero de la Guardia Civil trasladó a dos submarinistas hasta la misma orilla del Guadalquivir. La aeronave llegó a aterrizar en una pequeña explanada situada junto a la antigua estación del telecabina, un hecho que congregó a numerosos curiosos que, teléfono móvil en mano, grabaron el aterrizaje.

Uno de los buzos se sumergió sobre las nueve y cuarto de la noche, ayudado por su compañero y dos bomberos desde una embarcación. El submarinista realizó una serie de movimientos circulares en torno a la boya colocada cinco horas antes y se pasó más de cuarenta minutos buscando el cadáver sin éxito. Pasadas las diez de la noche, la búsqueda se suspendió por la falta de luz y sigue este miércoles.

La única información que ha trascendido hasta el momento es que el ahogado podría tratarse de un ciudadano polaco. El bañista había dejado sus pertenencias en la orilla de la Cartuja y prácticamente había cruzado ya todo el río cuando pidió auxilio. La Policía Nacional se ha hecho cargo de los efectos de este hombre y trabaja para corroborar que la documentación hallada entre sus pertenencias corresponde a él y no a otra persona. Durante las maniobras de búsqueda, en las inmediaciones de la pasarela y sobre la misma se congregaron numerosas personas que se acercaron -algunos con sus hijos pequeños- para observar el trabajo de los submarinistas.